lunes, 2 de junio de 2014

Así

Igual que los versos
cuando bailan tangos en mi espalda,
o cuando tú llevas en la tuya
colores y barcos sin destino,
o cuando vivo en tu mirada de mar azul naufragio

y las madrugadas se graban tu nombre
en el ombligo.

Así,
con el cabello a la altura de la tarde
y las pupilas llenas de sonrisas
hechas de colores,
con todas las ganas aún en las manos,
saltándonos los semáforos en rojo,
contando los pasos que doy
después de cada despedida.

Que para qué París, si Madrid está mas cerca.

Pensarás que
no es el momento.
Que no es la manera.

Y yo no sé qué pasas.
Pero pasas.

Y es que me rindo ante la belleza de la razón
y todo tiene sentido.
Incluso tú.

Así.
Porque ojalá así siempre. 
Lo sabes.

Esta la podemos bailar solos.
Lento.
Con toda la pista por delante, vida.