sábado, 30 de marzo de 2013

DAB

Qué triste me resulta recordar que a veces existes, y al mismo tiempo, dejas de hacerlo.
Qué triste me resulta saber que todo fue una mentira, de la que ni tú mismo sabías la verdad.
Qué triste el mundo que me rodea.
Qué triste la amistad. Qué triste la familia.
Qué triste la vida. Qué triste la muerte.
Qué triste el amor. Qué triste tú.
Como un sueño, apareces dichoso en mi mente, ya de forma involuntaria.
Todavía recuerdo esas miradas, esos pensamientos.
No eres nadie, y al mismo tiempo, lo eres todo.
Te odio. Te odio con toda mi alma. Te odio por haberme dejado caer al vacío. Te odio por no haberme cogido la mano. Te odio por haberte tirado tú, antes de que yo lo hiciera.
Me dejaste con un pequeño trocito de tierra, del que ya no recuerdo cuánto tiempo estuve resistiendo.
Me duele. Tú me dueles. Ya ni siquiera existes.
Ya sé que me retuerzo por dentro, recordándote. Aún recuerdo el primer dia, recuerdo perfectamente lo bien que me sentía. Aún puedo oler tu cabello. Tu dulce, dulce pelo, ese que tanto me gustaba tocar tan solo rozándolo, camuflándome, y haciéndote pensar que no lo hacía a propósito. Cada roce de mi piel contra ti era una sinfonía de felicidad, un estallido de colores que quería contarte, un magnífico sentido que se momificaba en milésimas.
Te amé sin conocerte y, sinceramente, me daba igual. Era la persona más feliz del mundo a tu lado.
Quería bailar, y fusionarme contigo en un solo ser. Quería ser mil, millones de cosas contigo. Te quería.
Y ahora, ¿qué me queda entre las manos? Un amargo sentimiento de nostalgia, un dulce odio que recorre mis pulmones, y un salado recuerdo de ti.
Dime, ¿de qué sirvieron los bonitos momentos contigo, si ya no los recuerdo? 
Dime, ¿de qué sirvieron, si no son más que puñales embadurnados de miel?
Enterrada estoy, siete metros bajo tierra, trescientos bajo agua, e infinitos bajo tus pies. 
Que no encuentro otro mejor entretenimiento que bailar sobre mi tumba, aún con el corazón robado y hecho añicos. Te divierte destrozar todavía más los pequeños fragmentos que tienes sobre la mesa, y jugar con ellos, como si fueran pequeños cristales rotos. 
Te odio, ¡te odio!, y ten por seguro que nadie, jamás, te odiará como yo lo hago, porque no hay verdad más cierta, de que te amo.

viernes, 29 de marzo de 2013

Cualquier abril

Desgastada sin razón, sin palabras te has quedado.
Yo pedí no ser más yo. Tú quisiste apostar a otro lado.

Retazos de un adiós que se avergüenzan de ver lo que ha quedado.
Pobre compasión, que acompaña a este blues de un ahorcado.

Engaña al corazón. Dile que el tiempo no fue solo en balde.
Se oculta la desolación de saber que de ser somos aire. 

Y la razón me la darán las heridas.
Viajo con abrigo largo, gabardina de capa caída, para tapar los recuerdos que guardé en el cajón de los días.
Otro abril para jugármelo a suerte. Otra vez que se queda a escondidas.
Y mi alma a jirones en un whisky barato se hundía.

Rota la esperanza que da el resignarse, no quedan más muelles a los que amarrarse.
Restauras sonrisas en ninguna parte.
Mis botas ya están cansadas de tanto viaje.

jueves, 28 de marzo de 2013

Será como hoy

Recuerdo el olvidar muriendo del vivir, y pienso en no pensar.
Duele la vida, ya ves, así.
Miradas de esas que queman el alma por dentro y por fuera. Son sus ojos, que me iluminan desde una estación, casi siempre vacía.

Y como un lobo con piel de cordero, discutiendo a insultos frente a un espejo.
¡Cobarde! ¿Donde está tu tiempo?
Barriendo termitas que comen mi pecho
¡Idiota! Eres un idiota. Sin haber nacido ya te has hecho viejo.
¡Tranquilo! Confía en el tiempo. Solo son cenizas que deja un te quiero.

Eres presencia invisible, sangre de mi pluma herida. Tengo mudo el sentimiento, y la razón llena de porquería.
Encadenadas pasan las horas, cantando la de la rutina. 
Trofeos de cartones sucios.
Y mañana será como hoy todavía.

martes, 26 de marzo de 2013

Cuidado con la tristeza, es un vicio

Por un momento pensé que había perdido el vicio. Ese vicio por el que me moría, y quizás por el que ahora me siga muriendo, aunque esa sensación no esté del todo clara.
Pensé que al alejarme, olvidaría el mono que sentía por verla, notarla, o incluso olerla.
Pensé que, al llegar esta época y al distanciarme de todo y de todos, olvidaría toda mi adicción.
De tanto pensar, he concluído que empecé siendo la jugadora más débil del tablero de ajedrez, la que caía en todos los vicios que me espiaban, pero que terminé siendo la única que podía decidir cómo acabaría la historia.
Y he decidido que quiero ser una drogadicta de la tristeza para siempre.

miércoles, 20 de marzo de 2013

No es lo mismo estar solo que estar sin ti

Puede que no sepa dibujar tus besos, ni describirte las montañas.
Puede que no sepa plasmarte mi amor en un papel, ni delinear las lágrimas que ríes.
Puede que no sepa mostrarte mis gemidos, ni mis pensamientos, porque los tengo escondidos en el fondo del armario. Y ya sabes que no es lo mismo manifestar tu nombre que hacerlo poesía y convertirlo en mentiras hechas arte. 
Que puede que no sepa nada del amor, pero estoy segura de que duele más cuando el nombre de otra está entre tus versos que cuando está en tu cama. Que ya sé que voy arrastrando mi mente con una cuerdecita, y que ya sabes lo de mi mala costumbre de ir dejándome el corazón olvidado por ahí. 
Pero todo tiene un momento para decirse o, en este caso, hacerse. Y es que me follé sin lealtad a la poesía, a los versos de otros, por si los celos te mataban y volvías a versarme. 
Pero qué hago, me estoy desviando del tema. 
Me gusta tu porno. ¿Qué quieres que haga?

lunes, 18 de marzo de 2013

Wait

Cuando toca esperar el regreso y la espera se hace eterna y no sabes hasta qué punto puede llegar a serlo, debes aferrarte a tus mejores recuerdos, a las imágenes grabadas en tu mente, a los momentos, a las melodías y a las canciones que crean algunos de ellos. 
Todos esos recuerdo los tienes grabados, te recuerdan y mantienen vivo a alguien o algo que ocupa un hueco en ti.Y más cuando sabes que ese regreso tardará un tiempo en llegar y ese alguien o algo se encuentra lejos de ti. 
Te mantendrás a base de recuerdos durante la espera, a pesar de que se haya ido hace tan poco.
Pero te mantendrás velando cada noche el horizonte, por si lo encuentras detrás de alguna estrella espiándote. Y te verá sola junto a tu baúl de los recuerdos a la espera de su regreso.

domingo, 17 de marzo de 2013

Never gonna give you up

—Bueno, pues el juego ya se ha acabado.
—En realidad hemos llegado al descanso.

—¿Quieres jugar la segunda parte?
—Aunque tenga que empujar el balón con las muletas.

Fck ths sht

¿Sabes esas ganas de matar que te entran cuando ves algo que era tuyo y que es usado en tu contra? 
¿Algo que te daña, que te duele? 
¿Que se te acumulan las lágrimas en los ojos y sientes que se te revuelve el estómago, cuando te pones triste y no sabes por qué? 
Pues eso es lo que siento yo todos los malditos días al verte a ti, a tus súbditas, a todo tu ejército.

sábado, 16 de marzo de 2013

En qué estrella estará

Hace ya mucho tiempo me dijiste que no importaba la distancia que nos separara, que bastaría con mirar al cielo, encontrar la estrella más brillante y pensar en la otra. Porque sabríamos que estaría haciendo lo mismo, que seguiríamos presentes la una en la otra. 
Yo me acuerdo y lo hago siempre que en mi cielo haya estrellas.
Espero que las nubes no impidan que te acuerdes de mí.

viernes, 15 de marzo de 2013

¡A ti!



Sí, a ti, tonta enamoradiza. 
A ti, que te enamoras de cualquier cosa. 
A ti, que conociste al imbécil tropecientosmilcientocuarentaysiete, y siempre dices "¡sí! ¡este es! este es al que estaba esperando".
¿Y qué haces? Dejas el móvil encendido veinticinco horas al día, y si te entran ganas de cagar te aguantas, por si te llama justo cuando estás haciendo fuerza. 
Durante una semana te vistes como una reina, y le sonries a cualquier estupidez con cara de tonta. Te pones tu perfume todo el día, te peinas cada tres horas y te depilas cada cinco, porque él te va a llamar.
Y suena el teléfono, que hasta lo pusiste en vibración para que fuera más emocionante, y cada vez que se mueve te da un vuelco el corazón. 
Y tu sonrisa sale de tu cara, y miras la pantallita con la misma cara de gilipollas. Y sigues esperando, porque obviamente no es él. Pero no te importa.
Vuelves a tu casa contenta porque piensas que va a estar en la puerta, esperándote con un ramo de flores, arrodillado, pidiéndote disculpas. Pero llegas y está el portero, que te dice que no ha llegado ni la revista. 
Y como todavía no llamó ¿qué haces? Lo llamas. Pero no te contesta. Y todavía no te conformas, le mandas un puto mensaje y piensas “este no falla, fijo que lo lee…”
Y ahí te quedas, esperando a que le de la puta gana de contestarte, para que el hijo de puta no tenga saldo. Pero tú lo entiendes y le das otra oportunidad.
Seguro que te mandó un e-mail. ¿Y qué haces? Enciendes el ordenador contenta, esperando que haya una declaración cibernética que lo explique todo. Pero no hay ningún e-mail nuevo, ni siquiera uno de esos de que te caerá la maldición gitana si no lo reenvías a setecientas personas en tres segundos. Y te cabreas. “El bastardo hijo de puta, del gato de la abuela de la tía de la prima de la madre." Sacas todas las barbaridades que te vienen a la cabeza. ¿Y qué haces? Llamas a todas tus amigas para rallarles la cabeza sobre la inexplicabilidad de los hechos, y recuerdas que ya te pasó lo mismo con la cuerda de subnormales de antes. ¿Y qué haces? Le hechas todas las maldiciones que te sabes, quieres que se haga mierda contra un puente, que pierda la memoria y que de lo único que se acuerde es de ti. “A éste no le contesto yo en la vida. Se va a enterar.” Ingenua de ti.
Y suena el teléfono. Y ahí está el número, ese que esperaste toda la puta semana parpadeando en tu pantallita.
¿Y qué haces? La cagas. Le contestas rapidísimo. Mal. ¿Estás tonta? ¿Sabes lo que va a pasar?
Te va a decir que estuvo ocupado. Que se reunió con unos amigos de la universidad. Que es todo un genio, que estuvo estudiando hasta tarde. Que estuvo ensayando. Que tenía parcial, que no durmió en toda la semana por estudiar y que se olvidó el móvil en la casa de su amigo. Que se le acabó la batería. Que lo apagó un rato. Que no tenía cobertura. Que estuvo trabajando sin comer ni dormir porque el éxito de la compañía descansa sobre sus hombros. Y claro, le vas a creer. ¿Sabes por qué? Por imbécil. Y lo peor de todo es que te va a invitar a salir, y todo lo que le insultaste y todo lo que le decías te lo vas a tener que meter por el culo. Y vas a terminar en su cama, durmiendo con el enemigo, y te va a meter en el coche, y te va a llevar a tu casa.
¿Y qué haces? Pillas el movil por si te llama y te dice que ha llegado bien, y esperas un rato largo. 
Hazme caso, amiga, espera que ese idiota te llame, pero mientras… ¡Llama a otro! Agarra tu banquillo de suplente y ármate un partidito de reserva. Diviértete, deja que te busquen, que festejen sus goles, pero mándalos rápidamente al banquillo antes de que se les suba la fama a la cabeza. Llama a tus amigas y sal a bailar, ¿quién coño te dice que no hay algo por ahí hecho especialmente para ti?
Déjate de lios, que todavía hay cabezas que cortar y muchas velas que soplar.
No pierdas el tiempo por un idiota cuando hay en el mundo muchos otros que esperan por ti. Muchos otros que serán tan o igual de idiotas que el otro, pero que en ese momento los tienes de reserva para darte cuenta de que el mundo está lleno de idiotas y que por ninguno de ellos debes de sufrir.

jueves, 14 de marzo de 2013

El brillo de las sonrisas oscuras


Soy lo que sé. 
Pensar que el amor es una enfermedad que se cura solo con la muerte, que la mentira es correcta y la verdad, mentira. Y que la enfermedad se llama "vivamos la vida de los demás porque no tengo cojones ni sangre para vivir la mía". 
Error y perfección de la mano, perfección e imperfección en el mismo bando.  
Enajenación mental permanente.


miércoles, 13 de marzo de 2013

Filosofeando



La magia exige la colaboración entre el artista y el público.
No sé por qué hay tanto celo por encontrar una explicación física convencional. 
No sé por qué la gente tiene tantos problemas en aceptar simplemente el hecho de que aquí ocurre algo inusual.
Hemos perdido toda la capacidad de conocer un mundo más allá de lo físico.
 
Yo soy un puente entre esos dos mundos.

Eso parece

Parece que unas manos de humo hayan agarrado mi cabeza y la hayan agitado, como si de una coctelera se tratase, y mis ideas hayan salido disparadas en múltiples direcciones, rebotando contra paredes de papel, donde se plasmaron con una pluma y donde quedaron hasta que el frágil papel ardió en la fogata de mi locura.
Mis ideas ardieron en mi locura, en el fuego que me quema por dentro.
Logré calmar la fogata con el agua de mis lágrimas, lágrimas de mi tristeza, e hice desaparecer el humo con los suspiros de mi nostalgia.
Humo que se convirtió en manos.
Manos que agitaban mi cabeza y daban hostias en mi cara.

martes, 12 de marzo de 2013

En vano

Entra en mi casa sin llamar a la puerta, como un ladrón buscando joyas en el cajón de los sujetadores.
Vaga por los pasillos dejando un rastro de olor a reminiscencias antiguas.
Abre la nevera, pasa por el baño y se mete en mi cama.
No lleva un pañuelo con cloroformo, pero sí uno impregnado de recuerdos. Recuerdos más melancólicos que mirar la lluvia por la ventana una tarde gris de otoño.
Que no hablo de violadores que invaden mi casa, sino de la nostalgia que invade mi mente.

Enfermo de la mala suerte.

Soy un enfermo. Un enfermo de un trastorno con mil y un síntomas.
Enfermo del tiempo, de la distancia, de los besos que no nos hemos dado. De las lágrimas que he derramado. De los caminos que he recorrido y de los que aún me quedan por recorrer.
Enfermo de la realidad. Enfermo de los sueños.
Enfermo de saber que existes, de saber que existo.
Enfermo terminal de mi existencia.
Y veo como mi mente se derrumba a la vez que el cigarro entre mis dedos se consume.


domingo, 10 de marzo de 2013

Success is so forbidding...


Todo es bonito, tranquilo, justo, agradable, tierno, atractivo, interesante, bueno, animado, único, sereno, sencillo, bailable, diferente, entero, vital...
Solo quiero cosas alegres.
A veces pienso que algo malo viene detrás.

sábado, 9 de marzo de 2013

Llegar alto no es crecer.

Querías llegar tan alto que pretendiste alcanzar las nubes y bañarte en ellas.
Querías llegar tan alto que era imposible mirarte.
Querías llegar tan alto que volaste y no te habías preparado aún para el vértigo.
Querías llegar tan alto que terminaste cayendo en la realidad inevitable.
Querías llegar tan alto que intentaste describir sentimientos con palabras.
Eso ya era demasiado para ti.
Así que se corrió la voz. 
Y se corrió en tu cara.

viernes, 8 de marzo de 2013

Lo que fácil viene, fácil se va.

Estar caminando por la calle y que pase al lado una persona con dos litros de colonia encima, colonia de a cinco céntimos el mililitro, de esa que hace que te gires intentando seguir el rastro del que la lleva, de esa que hueles y te entran unas ganas locas de follarte al mundo. Y pasa al lado esa mujer del tipo "no te lo crees", que a cada paso que da deja bajo su piel la piel hecha arcilla de la madre tierra. Y pasa al lado un jóven que deja a su paso la estela de la belleza hecha veinteañera. Y pasan, y pasan, y de repente pasa, que te cruzas con una persona que aunque ni deje huella alguna de su perfume ni haga bocas agua, te deja el corazón hecho azúcar. Y pasa que a veces pasa. Pero pasa de largo, y tras un encuentro fugaz de miradas profundas pero clandestinas, vuelves a buscar entre la muchedumbre de la calle otra mirada huidiza que se cruce con la tuya, que te encuentre.

jueves, 7 de marzo de 2013

Números que al verte serán besos por darte.

¿Pero por qué coño vives a tomar por saco? Te mato. La verdad es que te echo de menos.
Si pudiera, iría a verte, no por nada raro, simplemente para estar con alguien que me llena. Pero tengo un aguante. Hay cosas que tienen un momento para decirse, y para mí esto ha pasado de ser algo rutinario a ser algo serio.
Antes no me paraba a pensar en ti porque estás lejos, y era imposible, pero ahora ya no me sienta del todo bien. ¿Y dónde vives? Pues a tomar por el culo.
Creo que todo esto ya lo sabías o, al menos, lo imaginabas. Yo siempre voy a estar ahí para ti. Y si no hay nadie cerca para apoyarte, ¿sabes por qué es? Porque no están a tu puta altura. Les das mil vueltas. Yo solo soy amigo de quien realmente lo merece, y mira, siento por ti más que eso. Por algo será, ¿no? Algo tendrás. Sobre todo un corazón que no te cabe en el pecho.
                                                                              

miércoles, 6 de marzo de 2013

Ferrari vs Vida

Hay personas que dicen que sí, que todo se puede comprar, que no hay nada que no se pueda conseguir con dinero. Qué estúpidas esas personas, que no han sentido nunca la necesidad de aferrarse a un sentimiento. La necesidad de ver un relámpago, escuchar un trueno y ver las gotas de lluvia resbalando por una ventana. La necesidad de sentir el calor del sol una tarde de primavera. La necesidad de abrazar a tu pareja mientras las mariposas toman tu estómago. La necesidad de ser.
Qué estúpidas esas personas, que podrán sentir algo artificial, comprar una botella de agua y derramarla, sentir el calor de un solarium, pagar a una puta para sentirse queridas una noche y sentir mariposas en la polla. Pero quien dice que todo se compra con dinero, nunca sentirá de verdad a su corazón, ya que siempre lo podrá reemplazar por un ferrari.